lunes, 22 de septiembre de 2014

Keep calm and...¿Quieres salir conmigo?

¿Quieres salir conmigo?
Cuando era niña, al menos un poquito más de lo que soy ahora, y debido a esa educación tan Disney de la que ya en otras ocasiones os he hablado, tenía en la cabeza que cuando le interesabas a un chico, este te pedía “de salir”.




Y pasa el tiempo y me doy cuenta de que a medida que nos hacemos “mayores” eso ya no se estila, que no está de moda.

Y si lo que ha pasado de moda son las hombreras no me consterno y doy las gracias al cielo (¡Cuánto daño han hecho los 90 a la moda!), pero cuando se trata de frases y de momentos que de llevarse a cabo se te quedarían grabados en la retina, y darían lugar a numerosas anécdotas, en ese caso, mi sangre aumenta de temperatura y me dan ganas de preguntarnos: ¿Qué diablos nos está pasando?

¿En qué momento empezamos a pensar que pedir “de salir” es de críos, y que se da por supuesto que con 5 citas ya sois pareja?, ¿o es con 7?,  ¿quizá cuando te presenta a sus amigos? ¿o cuando deja un cepillo de dientes en el baño de tu casa?

Ja!


Por eso saco mi vena más reivindicativa (ya veis lo loca que estoy), y os animo a todos, a todas a que volvamos a pedir “de salir”.

Que si eso es de niños, corrobora una vez más algo que ya tenía yo muy claro desde hacía algún tiempo, y es que esa niña que aún tengo dentro no quiero perderla, y  digo más, quiero que en muchas circunstancias que me pone la vida por delante, sea ella la que decida.

Y tengo mi teoría, como de casi todo, y es que los niños, son pura naturalidad, sin filtros, sin miedos (más que al monstruo que vive debajo de la cama, pero a ese ¿quién no le tiene miedo?), lo que se les pasa por la cabeza les sale por la boca, para bien y para mal, lo que me indica que cuando crecemos vamos adquiriendo nuestros miedos, racionales o no, y en muchas ocasiones, estos nos impiden actuar como nos gustaría, o decir aquello que tantas ganas tenemos de decir.

Permitidme que os diga, que en muchas ocasiones nos perdemos tanto por algo tan simple, como pueden ser los respetos humanos.

Y ya que me pongo pues lo digo, cobardes.

Sí, si, cobardes con todas las letras, porque para decirle a la chic@ que te gusta ¿Quieres ser mi novi@? Sí que hace falta valor, y no para tirarse un cubo de agua helada por la cabeza.

El mundo está hecho para los valientes, para los que saben que el que no arriesga no gana y… es tiempo de arriesgarse.

Así que inicio la campaña, y como yo funciono a órdagos en muchas cosas de la vida, o todo o nada, aquí os dejo el órdago español por excelencia, ¿A que no hay huevos?


¿Quieres salir conmigo?

(S)

1 comentario:

  1. pues si, hay que ser valiente...qué digo valiente? hay que hacer las cosas bien, y punto; yo ya estaba convencida...me da un pelín de pánico aterrorizante, paralizador y escalofrítico, pero ná! estoy decidida! (vos entendés lo que te digo, vishte?? ;))

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